Las aduanas son el punto de intercambio de productos y materias primas entre países. En estas puertas bidireccionales, se vela por el cumplimiento de la legislación, así como por el pago de los cánones que sean necesarios. La tecnología de exportación e importación también ha avanzado, para facilitar las inspecciones, los controles y el cobro de impuestos.
El sector del transporte de mercancías requiere de un flujo rápido y constante, por lo que un solo producto que tenga problemas con la burocracia puede retrasar a otras empresas. Los retrasos en este sector significan pérdidas económicas en la mayoría de los casos. Para evitar esto y hacer los trámites más sencillos, las aduanas incorporan diferentes adelantos tecnológicos que ya se pueden ver hoy día.
¿Por qué se debe potenciar la tecnología aduanera?
Las empresas que más sufren este cuello de botella que suponen los trámites son las pequeñas y medianas. Para garantizar un acceso justo a los mercados comunes e internacionales, se deben poner en marcha tecnología de aduanas que ayuden a simplificar los trámites.
Algunas propuestas en tecnología de aduanas
En muchos casos, la aceleración de trámites puede hacerse antes incluso de llegar al punto aduanero. En países con mercados comunes, es posible crear diferentes certificados que puedan ser comprobables por los agentes de forma sencilla. Los trámites para importar a un país se pueden hacer por adelantado, consiguiendo como comprobante de estos trámites un código QR o de barras tradicional. El agente de aduanas solo tendrá que escanear este código y recibir la confirmación.
Esta es una técnica que se propone para esta situación. Había sido pensada para vuelos comerciales y, en este caso, los pasajeros iban respondiendo a preguntas en una app que servía de autentificación. Respondían a estas cuestiones mientras transitaban por el aeropuerto, esperaban en una fila o aguardaban la salida de la maleta,
Existen fronteras en el mundo en las que un mínimo retraso supondría una pérdida muy grande para las empresas. A diario, el paso de Calais en Francia se convierte en uno de estos puntos. Desde la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, estos trámites se han complicado y los transportistas gastan más tiempo en la aduana. Lo mismo sucede en espacios como la frontera de Gibraltar.
Junto a los formularios electrónicos y los códigos, aparecen otras opciones orientadas a facilitar el tránsito. Se está desarrollando una tecnología aduanera que busca poder examinar por escáner de manera precisa el contenido de los cargamentos. Para evitar el contrabando de sustancias y personas, hay diferentes dispositivos sensoriales que se están probando en diferentes fronteras.
Otra forma de adelantar tiempo es segmentar a los transportistas. Sabemos que cada tipo de carga es más sensible al paso del tiempo o la exposición. Organizar de manera adecuada la mercancía puede evitar perjudicar a aquellos con cargamentos más vulnerables.
Conclusiones
El mundo de las aduanas necesita un nuevo giro. La tecnología de exportación e importación es esencial para contrarrestar la lentitud de algunos procesos burocráticos. También las empresas pueden tener en su mano algunas herramientas con las que adelantar posiciones en las colas de entrada y salida de mercancías.